El fin de semana del primero de mayo hemos estado visitando Deba, que nos cae cerquita y no lo conocíamos.
Sin ir buscando nos aparecieron dos fruterías en el paseo por sus calles. Una de ellas, la de Sukia, me encantó y me pareció una preciosidad. Limpia y con buen género por lo que se dejaba ver desde el cristal del escaparate.
Coqueta, con las cortinas bordadas y un enorme ramo de calas de regalo a la vista del paseante. Pinchad en las fotos para agrandar
Enhorabuena Sukía por tu precioso comercio.