Ingredientes:
- 5 cucharadas soperas rasas azúcar glass
- 20 fresas
Para la pasta:
- 125 grs. de harina
- 60grs. de mantequilla ligera
- 4 huevos
- Una pizca de sal
Para el glaseado:
- 3 cucharadas soperas de azúcar glass
- 500 grs. de kiwis
- El jugo de un limón
ELABORACIÓN :
Precalentar el horno a 220ºC. Poner en un cazo 1/4 de litro de agua con la mantequilla y la sal. Llevar a ebullición. Separar del fuego y añadir la harina removiendo con fuerza. Volver a poner al fuego sin dejar de remover, hasta que la pasta se haga consistente. Separar del fuego. Añadir los huevos uno por uno hasta conseguir una pasta homogénea que se adhiera al dedo. Con ayuda de una cucharita, poner 20 bolitas de pasta sobre la bandeja del horno ligeramente engrasada. Deben estar los suficientemente separadas unas de otras para que no se peguen durante la cocción. Hornear 15 minutos. Dejar enfriar. Con un cuchillo, hacerles una abertura en un lateral. Lavar y escurrir las fresas. Rociarlas con el azúcar glass e introducir una en cada bocadito.
Glaseado: Pelar y cortar los kiwis. Mezclar con el zumo de limón y el azúcar. Servir inmediatamente con los bocaditos.
¡Ojo!
Es conveniente servir inmediatamente, a que los bocaditos pueden reblandecerse con el zumo de las fresas. De todos modos, se mantienen perfectamente 2 horas en la nevera.